Último examen de la troika a Portugal tres años después del rescate

El comisario europeo de Asuntos Económicos, Ollin Rehn, durante una rueda de prensa en Bruselas, el 5 de marzo de 2014

La troika (UE-FMI-BCE) inició este martes en Lisboa el último examen de las medidas de austeridad de Portugal, que se prepara para seguir el ejemplo irlandés y convertirse en el segundo país de la zona euro en poner fin a la tutela de sus acreedores.

Portugal escapará a la humillación de un segundo rescate. "No es cualquier control, es el último. Es el examen que nos permitirá recuperar nuestra autonomía política y financiera", dijo el lunes el viceprimer ministro, Paulo Portas.

Sin embargo, la esperada salida de los denominados 'hombres de negro', no pondrá fin a las draconianas medidas de austeridad en vigor desde hace tres años.

"Un compromiso amplio sobre la disciplina presupuestaria es crucial para garantizar que la deuda siga siendo sostenible y mantener la confianza de los mercados", indicó el lunes el Fondo Monetario Internacional (FMI).

El Gobierno sigue manteniendo el suspense sobre las modalidades de la conclusión del plan de ayuda prevista para el 17 de mayo. ¿Optará por una línea de crédito precautoria a la que podría recurrir en caso de necesidad o un regreso a los mercados a la irlandesa, sin red de seguridad? La respuesta se espera como muy tarde para el 5 de mayo, fecha de la próxima reunión de ministros de Economía de la zona euro, en la que se oficializará la salida de Portugal de su plan de ayuda de 78.000 millones de euros, cinco meses después de Irlanda.

Los sindicatos no se hacen muchas ilusiones: "Con o sin programa precautorio, la política de austeridad va a proseguir. Son siempre los mismos los que seguirán pagando la factura", lamentó Arménio Carlos, secretario general de la CGTP, principal confederación sindical.

Portugal realiza el miércoles su primera emisión regular de deuda a diez años desde que pidió ayuda en abril de 2011, en lo que constituye, sin duda, una prueba crucial para la decisión del Gobierno. La agencia de la deuda portuguesa espera emitir entre 500 y 750 millones de euros, sin recurrir como antes al fondo bancario que limita los riesgos.

- Con o sin red de seguridad -

La emisión de deuda de Portugal "tendrá un gran éxito", predice Jesús Castillo, analista del banco Natixis. "Esta nueva emisión da un paso más en el camino de la salida del plan de ayuda sin línea de crédito adicional", comentó a la AFP.

Se está comparando a Portugal con Irlanda. La brusca caída de los tipos de interés era inimaginable el verano pasado, cuando el país se vio sacudido por una grave crisis política que hizo temblar los mercados.

"Las tasas que paga Portugal se acercan a las que pagaba Irlanda cuando estaba a punto de anunciar la salida de su programa" en diciembre, constató Paulo Portas. La tasa de Irlanda a diez años era entonces del 3,5%, comparada con el 3,7% en la actualidad para Portugal.

La caída de los tipos de interés hace factible una salida sin red de seguridad, una opción que prefieren Alemania y Finlandia. En cambio, otros, como el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, preconizan un programa de precaución, ya que consideran que "vale más prevenir que curar".

"Aunque la emisión del miércoles sea exitosa, no garantiza que no vaya a haber obstáculos. Los mercados son muy volátiles", dice, prudente, Paula Carvalho, economista del BPI.

Para tranquilizar a los acreedores sobre la continuación del programa de austeridad, Portugal ya ha anunciado nuevas medidas para ahorrar 1.500 millones de euros en 2015. El Gobierno ha prometido reducir los gastos de los ministerios, pero no pedirá nuevos sacrificios a los portugueses.